¿Sabías que los exorcismos se realizan en algo tan común como el rito del bautismo? La mayoría de las veces cuando la gente piensa en exorcismo ellos piensan en dramáticas situaciones como las que se presentan en películas como El Rito o El Exorcista.

Existen dos tipos de exorcismos: exorcismos mayores y exorcismos menores. Un exorcismo mayor es un solemne ritual realizado por un sacerdote cuando se cree que una persona está poseída por un demonio. Son muy raros y solo pueden ser realizador por sacerdotes autorizados. En cambio, un exorcismo menor es un exorcismo más general y puede ser realizado incluso a personas no poseídas. Esto ocurre, por ejemplo, durante el rito del bautismo.

Pero, si los niños recién bautizados no están poseídos, ¿por qué necesitarían un exorcismo en el rito del bautismo?

El Catecismo de la Iglesia Católica nos da la respuesta: “Puesto que el Bautismo significa la liberación del pecado y de su instigador, el diablo, se pronuncian uno o varios exorcismos sobre el candidato”.

Todos los seres humanos nacen con el pecado original (Con excepción de Jesús y María). Como el Concilio de Trento enseñó, esto nos hace “por naturaleza hijos de la ira”, “siervos del pecado” y “debajo del poder del diablo y de la muerte”. Cuando una persona es bautizada recibe la gracia de Dios y pasa de la muerte a la vida, del dominio de Satanás a la Iglesia de Dios. Por eso, un exorcismo es apropiado en el rito del bautismo.

Para quienes estén interesados, esta es la oración de exorcismo en el rito del bautismo, llamada “Oración de exorcismo y unción antes del Bautismo”

Dios todopoderoso y eterno, que has enviado a tu Hijo al mundo, para librarnos del dominio de Satanás, espíritu del mal, y llevarnos así, arrancados de las tinieblas, al Reino de tu luz admirable; te pedimos que este niño, lavado del pecado original sea templo tuyo, y que el Espíritu Santo habite en él. Por Cristo nuestro Señor. Amén.

La forma extraordinaria del rito del bautismo también incluye un exorcismo menor que es más explícito. Se hace en latín, pero esta es la traducción al español:

Te exorcizo, espíritu inmundo, en el nombre del Padre y del Hijo, y del Espíritu Santo, para que salgas y te apartes de este siervo de Dios, N. Porque él te manda, maldito, que caminó sobre el mar, y extendió su mano derecha a Pedro a punto de hundirse. Por tanto, maldito diablo, reconoce tu sentencia y da honor al Dios vivo y verdadero; da gloria a Jesucristo su Hijo, y al Espíritu Santo; y apartaos de este siervo de Dios, N. porque Dios y nuestro Señor Jesucristo se ha dignado llamarlo (a ella) a su santa gracia y bendición ya la fuente del bautismo.

Así que si fuiste bautizado en la Iglesia Católica, ¡fuiste exorcizado! 

Síguenos también en:

Telegram
Instagram
Twitter

[Ver: Así respondía el Santo Cura de Ars a los insultos del demonio]

[Ver: El demonio teme a San Juan Pablo II por estas dos razones]

Comparte