No creerás cuánto tiempo llevan estas monjas en Adoración Eucarística Ininterrumpida
Los católicos creemos que Jesús está presente con su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad en la Santa Eucaristía. Por eso es normal que la Adoración Eucarística se haya convertido en la forma de devoción más popular a nivel mundial. Un grupo de monjas han llevado esta devoción a un nuevo nivel.
Conoce a las Franciscanas de la Adoración Perpetua, quienes, a pesar de los incendios, inundaciones y brotes de gripe, han mantenido la oración ante la Eucaristía por casi 140 años.
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El grupo se remonta hasta 1849, cuando un pequeño grupo de mujeres de Baviera iniciaron las Hermanas de San Francisco en Milwaukee, Wisconsin con el propósito de difundir el Evangelio entre los inmigrantes alemanes. En 1856, comenzaron a ayudar al seminario local, pero el trabajo rápidamente llegó a ser muy exigente. Con mucho por hacer y la imposibilidad de vivir una adecuada vida de oración, algunas de los fundadoras dejaron la comunidad.
El resto de las mujeres decidieron reorientar su misión y trasladaron su convento a Jefferson (Wisconsin) en 1864, pero luego volvieron a Wisconsin en la Diócesis de La Crosse. Ellas aún buscaban su propósito.
En 1873, la madre superiora decidió que trabajar en el seminario no era la mejor idea. Ella quería que las hermanas dejaran ese trabajo y encontraran otro que les permitiera centrarse más en la adoración eucarística. Sin embargo, no todas las hermanas estuvieron de acuerdo, por lo que se produjo una división: algunas dejaron el grupo y formaron uno nuevo llamado las Hermanas de San Francisco de Asís, y el grupo original cambió su nombre a Franciscanas de la Eucaristía.
Pero no fue hasta 1878 que las hermanas descubrieron lo que sería su verdadera vocación: la adoración perpetua. Se comprometieron a tener al menos dos hermanas rezando ante la Eucaristía las 24 horas del día, 7 días a la semana, los 365 días del año. No importa cómo y de manera indefinida.
Así cambiaron de nombre por última vez a Franciscanas de la Adoración Perpetua.
Empezaron exactamente el 1 de agosto 1878 a las 11 de la mañana – ¡y no han parado desde entonces!
Y no es que no hayan sido presionadas para dejar de hacerlo. En 1923, se produjo un incendio en un edificio adyacente. Su ciudad sufrió una inundación en 1965. Se han producido brotes de gripe, terribles tormentas, y guerras mundiales. Pero siempre se han mantenido en adoración ininterrumpida.
Para lograr esto han tenido que hacer algunos cambios. Sus miembros, por desgracia, han disminuido drásticamente en las últimas décadas. Por eso, en 1997, después de 119 años de adoración ininterrumpida, decidieron recurrir a miembros de su comunidad local para obtener ayuda. Ahora, religiosas y laicos voluntarios se turnan para continuar con la adoración eucarística.
¡Pero ellas no se ha detenido! Y como resultado, se cree que esta es la más larga oración continua llevada a cabo en los Estados Unidos.
Ellas tienen un enfoque particular en la oración por la enfermedad y el sufrimiento. Estiman que han orado por más de 150.000 personas solo en la última década. Si usted tiene alguna que necesidad de oración (¿quién no?), puede llenar este formulario en línea y ellas añadirán dicha petición a su lista de oración.
Sor Sarah Hennessey, quien coordina el calendario para la adoración eucarística, explica algunas reglas para que esto nunca se detenga: “Si son las 11 de la noche y ya terminé mi hora de adoración, pero otra hermana no aparece, simplemente no puedo ir a la cama.”
“Es como ‘son 137 años ¡Tengo que seguir despierta!'”
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— ChurchPOP Español (@ChurchPOP_es) 26 de enero de 2016