Los secretos de la imagen de Jesús Misericordioso para vivir el domingo de la Divina Misericordia
Seguro has visto la imagen de Jesús Misericordioso en muchas iglesias y hogares de católicos. ¿Cuál es su significado? Conoce todo sobre esta pintura y los secretos de la Divina Misericordia.
La revelación de la imagen de Jesús Misericordioso
Santa Faustina de Kowalska recibió el mensaje de Jesús sobre la imagen que debía elaborar el 22 de febrero de 1931. El Señor se le apareció mientras estaba en su celda en el convento de Plock, en Polonia. Así lo cuenta la santa:
“Vi al Señor Jesús vestido con una túnica blanca. Tenía una mano levantada para bendecir y con la otra tocaba la túnica sobre el pecho. De la abertura de la túnica en el pecho, salían dos grandes rayos: uno rojo y otro pálido.
Jesús me dijo: pinta una imagen según el modelo que ves, y firma: ‘Jesús, en Ti confío'” (Diario de Santa Faustina, 47)
El significado de los rayos
En 1934, Santa Faustina le preguntó a Jesús -por consejo de su confesor- qué significaban los rayos de la imagen. Durante una oración Cristo le contestó:
“Los dos rayos significan la Sangre y el Agua. El rayo pálido simboliza el Agua que justifica a las almas. El rayo rojo simboliza la Sangre que es la vida de las almas.
Ambos rayos brotaron de las entrañas más profundas de Mi misericordia cuando Mi corazón agonizante fue abierto en la cruz por la lanza.
Estos rayos protegen a las almas de la indignación de Mi Padre. Bienaventurado quien viva a la sombra de ellos, porque no le alcanzará la justa manos de Dios” (Diario de Santa Faustina, 299).
¿Que simbolizan estos rayos? Según Sor Ma. Elzbieta Siepak, la justificación y purificación son los sacramentos del bautismo y la reconciliación, mientras que la vida de estas almas se alimenta con la Eucaristía.
“Entonces, ambos rayos significan los sacramentos y todas las gracias del Espíritu Santo cuyo símbolo bíblico es el agua, y también la nueva alianza de Dios con el hombre contraída en la Sangre de Cristo” (Introducción al Diario de Santa Faustina).
“Jesús, en Ti confío”
Además de presentar la Misericordia de Dios, esta imagen nos recuerda que debemos confiar en Dios y amar activamente al prójimo:
Esta imagen ha de recordar las exigencias de Mi misericordia, porque la fe sin obras, por fuerte que sea, es inútil” (Diario de Santa Faustina, 742).
La pintura y el Evangelio del día
El primer domingo después de la Pascua de Resurrección, la lectura del Evangelio narra la aparición de Cristo resucitado en el Cenáculo y la institución del sacramento de la penitencia (Jn 20, 19-31).
Como comenta Sor Ma. Elzbieta Siepak, este relato nos presenta a un Jesús resucitado que trae la paz a la humanidad por medio del perdón de los pecados por su Pasión y muerte en la cruz.
Los rayos de Sangre y Agua que brotan del corazón de Cristo (debajo de su mano izquierda) se relacionan con lo que brotó de la herida en el costado tras ser atravesado con a lanza en la cruz, y con la heridas que Jesús exhibe a Tomás en el Cenáculo. Todo guarda relación con el Viernes Santo.
La imagen de Jesús Misericordioso une estos dos momentos del Evangelio y revelan con mayor claridad el amor de Dios al ser humano (Introducción al Diario de Santa Faustina).
¡Jesús, en Tí confiamos!
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