La historia del astronauta que llevó la Eucaristía al espacio
Mike Hopkins fue criado en una familia protestante, pero cuando se casó con una mujer católica, decidió criar a sus hijos en esta fe.
Después de un período de discernimiento, se unió al Rito de Iniciación Cristiana para Adultos (RICA) y fue recibido en la Iglesia Católica en 2012.
Como astronauta, pasa largos períodos en el espacio llevando a cabo importantes misiones. Pero viviendo su fe católica con seriedad y compromiso, sabe que la Eucaristía es el alimento necesario para fortalecer el alma y el corazón en cualquier momento.
En su testimonio en el 10º Congreso Eucarístico Nacional en Indianápolis (Estados Unidos), Hopkins compartió el impacto de tener la Eucaristía con él cuando fue enviado en su primera misión a la Estación Espacial Internacional como astronauta en septiembre de 2013.
"Josué 1,9 dice: ' ¿Acaso no soy yo el que te ordeno que seas fuerte y valiente? No temas ni te acobardes, porque el Señor, tu Dios, estará contigo dondequiera que vayas.' Y creo que eso incluye más allá de los confines de la Tierra", comenzó.
"Para mí, el recordatorio más poderoso de que Dios estaba conmigo vino en forma de la Eucaristía", declaró Hopkins.
"Una de las actividades más peligrosas que hacemos como astronautas son las actividades extravehiculares, EVAs o caminatas espaciales. Y he salido por la puerta de la Estación Espacial Internacional cinco veces, pasando 32 horas afuera en el vacío del espacio.
Y cada mañana de esas caminatas espaciales, antes de comenzar a ponerme el traje en la tranquilidad de mi camarote, recibía la comunión y el conocimiento de que sin importar lo que sucediera durante las próximas 15 horas, Jesús estaba conmigo”.
“No puedes imaginarte el consuelo que me daba", afirmó, revelando que tenía las hostias en un píxide almacenado en su traje cerca de su corazón.
Para transportar las hostias consagradas, fue ayudado por su párroco y obtuvo un permiso especial de la Arquidiócesis de Galveston-Houston.
Mira el discurso completo en inglés de Mike Hopkins en el Congreso Eucarístico: