5 cosas que deberías saber sobre el Espíritu Santo
En Pentecostés celebramos la venida del Espíritu Santo sobre la Virgen María y los apóstoles.
Ese día los apóstoles salieron a las calles de Jerusalén y comenzaron a predicar el Evangelio. La Biblia dice: “Los que recibieron su palabra se hicieron bautizar; y ese día se unieron a ellos alrededor de tres mil” (Hechos 2, 41).
He aquí una lista de 5 cosas que deberías saber sobre el Espíritu Santo:
1) Es una persona
No es una cosa o un “qué”; Él es un “QUIÉN”. Es la tercera persona de la Santísima Trinidad, a pesar de que pueda parecer más misterioso que el Padre y el Hijo, es tan persona como ellos.
2) Es completamente Dios
El hecho de que el Espíritu Santo sea la “tercera” persona de la Santísima Trinidad no significa que sea inferior al Padre y al Hijo. Las tres personas, entre ellos el Espíritu Santo, son plenamente Dios y “tienen una sola divinidad, gloria igual y coeterna majestad”, como dice el Credo de Atanasio.
3) Siempre ha existido, incluso en tiempos del Antiguo Testamento
Aunque hayamos aprendido la mayor parte de cosas sobre el Espíritu Santo (y el Hijo) en el Nuevo Testamento, Él ha existido siempre. Dios existe eternamente en tres personas. Por eso, cuando leemos acerca de Dios en el Antiguo Testamento, recordemos que se trata de la Trinidad.
4)Lo recibes en el Bautismo y la Confirmación
Está presente en el mundo de manera misteriosa y no siempre lo entendemos. Sin embargo, una persona recibe el Espíritu Santo de una manera especial por primera vez en el bautismo y se fortalece en sus dones en la Confirmación.
5) Los cristianos son templos del Espíritu Santo
Vive de manera especial en los cristianos, por lo tanto, al respecto existen serias consecuencias morales, como San Pablo explica:
“Eviten la fornicación. Cualquier otro pecado cometido por el hombre es exterior a su cuerpo, pero el que fornica peca contra su propio cuerpo. ¿O no saben que sus cuerpos son templo del espíritu Santo, que habita en ustedes y que han recibido de Dios? Por lo tanto, ustedes no se pertenecen, sino que han sido comprados, ¡y a qué precio! Glorifiquen entonces a Dios en sus cuerpos.” 1 Corintios 6, 18-20.
¿Qué más añadirías a esta lista?
[Ver: ¿Cómo serán nuestros cuerpos después de la Resurrección de la carne? ¡No lo vas a creer!]
[Ver: Curioso suceso en un bautismo nos recuerda la importancia del sacramento]